El trastorno por déficit de atención con hiperactividad (ADHD, por sus siglas en inglés) es una afección por la cual una persona tiene problemas para prestar atención y concentrarse en las tareas, tiende a actuar sin pensar y tiene problemas para estar sentada quieta. Es posible que comience durante la infancia temprana y puede continuar en la adultez. Sin tratamiento, el ADHD puede causar problemas en el hogar, en la escuela, en el trabajo y con las relaciones. En el pasado, el ADHD solía llamarse trastorno por déficit de atención (ADD, por sus siglas en inglés).
La causa exacta no está clara, pero el ADHD tiende a ser hereditario.
Los tres tipos de síntomas del ADHD incluyen:
El ADHD a menudo se diagnostica cuando un niño tiene entre 6 y 12 años de edad. Es posible que los maestros noten síntomas en los niños que están en este grupo de edad.
En primer lugar, se le harán unas pruebas al niño para asegurarse de que no tenga otros problemas, como deficiencia de aprendizaje, depresión o trastorno de ansiedad. El médico utilizará los criterios de la Asociación Estadounidense de Psiquiatría (American Psychiatric Association) para el diagnóstico del ADHD. También es posible que el médico examine informes escritos acerca de la conducta del niño. Los informes son preparados por los padres, los maestros y las demás personas que tengan contacto regular con el niño.
Si bien no existe cura para el ADHD, el tratamiento podría ayudar a controlar los síntomas. El tratamiento podría incluir medicamentos y terapia conductual. Los padres y otros adultos deben vigilar de cerca a los niños después de que empiecen a tomar medicamentos para el ADHD. Los medicamentos podrían causar efectos secundarios, como pérdida del apetito, dolores de cabeza o dolores abdominales, tics o espasmos, y problemas para dormir. Los efectos secundarios, generalmente, mejoran en pocas semanas. En caso contrario, el médico puede reducir la dosis.
La terapia se centra en realizar cambios en el entorno para mejorar la conducta del niño. Por lo general, la asesoría psicológica y el apoyo adicional en el hogar y en la escuela ayudan a los niños a tener éxito en la escuela y a sentirse mejor acerca de sí mismos.
Muchos adultos no se dan cuenta de que tienen ADHD hasta que se les diagnostica la enfermedad a sus hijos. Luego, comienzan a notar sus propios síntomas. Es posible que los adultos con ADHD tengan dificultad para concentrarse, organizarse y terminar las tareas. A menudo olvidan cosas. Sin embargo, también suelen ser muy creativos y curiosos. Les encanta hacer preguntas y seguir aprendiendo. Algunos adultos con ADHD aprenden a manejar sus vidas y encuentran carreras que les permiten usas esas fortalezas.
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Se desconoce la causa exacta del trastorno por déficit de atención con hiperactividad (ADHD, por sus siglas en inglés). Sin embargo, es posible que sea hereditario. Las investigaciones actuales se centran en encontrar los genes que hacen que una persona tenga más probabilidades de tener ADHD.
El consumo de cigarrillos, alcohol u otras drogas por parte de las madres durante el embarazo podría aumentar el riesgo de ADHD. Además, la exposición al plomo podría causar síntomas relacionados con el ADHD.nota 1
Aunque muchos padres consideren que los alimentos con azúcar y los aditivos de los alimentos hacen que sus hijos sean más hiperactivos, no se ha demostrado que estos alimentos causen el ADHD.nota 2
Los tres tipos de síntomas de ADHD incluyen:
Estos síntomas afectan a todas las personas que tienen ADHD. Pero la conducta típica varía con la edad.
El trastorno por déficit de atención con hiperactividad (ADHD, por sus siglas en inglés) puede ser difícil de identificar en un niño pequeño. Puede ser difícil diferenciar entre conducta normal y los síntomas de ADHD en niños pequeños.
Pero después de que un niño comienza la escuela, el ADHD se nota cada vez más. El ADHD suele diagnosticarse en niños de entre 6 y 12 años. Durante este período, el ADHD puede interferir en muchos aspectos de la vida de un niño. Aprender, adaptarse a cambios, dormir y llevarse bien con otros son todas áreas problemáticas potenciales.
Aproximadamente entre 60 y 85 de cada 100 niños con ADHD todavía tienen síntomas durante la adolescencia.nota 3 Estos niños pueden ser menos maduros que sus pares. Pueden retrasarse en alcanzar hitos comunes para su grupo de edad.
Los adolescentes con ADHD también pueden tener más problemas al manejar autos. Tienen más multas por infracciones de velocidad y tienen accidentes automovilísticos graves con más frecuencia. Un adulto con licencia debe vigilar de cerca a los adolescentes con ADHD cuando están aprendiendo a conducir.
Los adultos con ADHD pueden tener problemas para concentrarse, organizarse y terminar tareas. Pero suelen ser capaces de adaptarse al lugar de trabajo mejor de lo que lo hicieron en el aula cuando eran niños.
Las personas con ADHD suelen tener uno o más trastornos adicionales. Estos incluyen dislexia, trastorno de oposición desafiante, trastorno disocial, ansiedad y depresión.
Criar a un niño que tiene ADHD puede ser un desafío. Los padres deben vigilar a sus hijos en forma sistemática. Deben responder a la conducta problemática correctamente. Si otros asuntos están causando estrés dentro de una familia (como divorcio, violencia o abuso de drogas o alcohol), es posible que sea incluso más difícil manejar a un niño que tiene ADHD.
Un tratamiento puede ayudar a controlar los síntomas. Puede permitir que un niño crezca y se desarrolle normalmente.
Llame a un médico si:
Pregúntele a su médico sobre su capacitación y experiencia relacionada con ADHD. El médico debe ser capaz de identificar y distinguir conductas que son sutiles y complicadas. Además, asegúrese de que su médico disponga del tiempo suficiente para evaluarlo a usted o a su hijo. Un diagnóstico preciso y un tratamiento eficaz de ADHD llevan varias citas en el consultorio y observaciones. Su médico debería, además, poder coordinar la participación de otros profesionales de la salud, familiares, maestros y personas encargadas de cuidados.
Los profesionales de la salud que pueden diagnosticar y tratar el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (ADHD) con medicación incluyen:
Los profesionales de la salud que no recetan medicamentos, pero que pueden proporcionar terapia conductual o asesoría psicológica familiar incluyen:
Un médico se basa en una combinación de exámenes, pruebas e información adicional para diagnosticar el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (ADHD, por sus siglas en inglés). El médico tendrá en cuenta los criterios establecidos por la Asociación Estadounidense de Psiquiatría (American Psychiatric Association o APA, por sus siglas en inglés). El diagnóstico se basará en:
Antes de la cita con el médico, piense en a qué edad comenzaron los síntomas de su hijo. Usted y otras personas encargadas de cuidados deberían anotar cuándo ocurre cierta conducta y cuánto dura. Una parte importante de la evaluación de ADHD es pensar sobre las clases de problemas causados por diferentes tipos de conducta. ¿Cómo afectan la escuela y el comportamiento social?
Es posible que le realicen pruebas verbales y escritas a su hijo para averiguar si los problemas de conducta son causados por otras afecciones con síntomas similares.
Por ejemplo, es posible que los niños con ADHD tengan dificultad para aprender a leer, a escribir o a resolver problemas matemáticos. Realizar pruebas para detectar estas discapacidades en el aprendizaje ayudará a los maestros a preparar el mejor plan para un niño con estos problemas.
Si usted está preocupado sobre el desarrollo del temperamento, las capacidades de aprendizaje y la conducta de su hijo, hable con su médico en la próxima visita.
El tratamiento del trastorno por déficit de atención con hiperactividad (ADHD, por sus siglas en inglés) se basa en una combinación de medicamentos y terapia conductual. El tratamiento con medicamentos depende de la edad de su hijo. El primer paso es un diagnóstico preciso del ADHD y una comprensión de las debilidades y de las fortalezas de su hijo. Aprender acerca del ADHD los ayudará a usted y a los hermanos de su hijo a comprender mejor cómo ayudar a su hijo.
Los siguientes medicamentos pueden usarse para el ADHD:
Es posible que el médico de su hijo recomiende que su hijo tome un medicamento estimulante. Estos medicamentos incluyen anfetaminas (por ejemplo, Adderall o Dexedrine) y metilfenidato (por ejemplo, Concerta, Metadate CD o Ritalin). Los estimulantes mejoran los síntomas en, aproximadamente, 70 de cada 100 niños que tienen ADHD.nota 1
Si los medicamentos estimulantes tienen efectos secundarios molestos o no son eficaces, el médico de su hijo podría recomendarle un medicamento no estimulante, como atomoxetina (Strattera), clonidina (Kapvay) o guanfacina (Intuniv). Estos medicamentos pueden usarse solos o en combinación con medicamentos estimulantes.
Con la terapia conductual, los padres aprenden estrategias, como refuerzo positivo, para mejorar las conductas de un niño. Los niños aprenden a desarrollar habilidades de resolución de problemas, de comunicación y de autodefensa. La terapia conductual es más útil cuando se la combina con medicamentos que cuando se la utiliza sola.
Algunos niños con ADHD también tienen otras afecciones, como ansiedad o trastorno de oposición desafiante. La terapia conductual puede ayudar a tratar algunas de estas afecciones.
Es posible que la asesoría psicológica ayude a los niños y a los adultos con ADHD a reconocer las conductas problemáticas y a aprender técnicas para tratarlas. Tanto para padres como para niños, la asesoría psicológica puede ser un lugar para expresar las frustraciones y manejar el estrés. Para saber más, vea Otro tratamiento.
Hay muchas cosas que puede hacer usted para ayudar a su hijo en el hogar y en la escuela. Para saber más, vea Tratamiento en el hogar.
Muchos adultos no se dan cuenta de que tienen ADHD hasta que se les diagnostica ADHD a sus hijos. Es entonces cuando empiezan a reconocer sus propios síntomas. Algunos adultos con ADHD aprenden a manejar sus vidas y encuentran carreras en las cuales pueden usar su curiosidad intelectual y creatividad a su favor. Pero muchos adultos tienen dificultades en el hogar y en el trabajo.
Al igual que los niños con ADHD, los adultos pueden beneficiarse de medicación combinada con apoyo psicológico. Este apoyo incluye educación sobre el trastorno, grupos de apoyo o asesoría, y capacitación en habilidades. La capacitación en habilidades puede incluir:
Los medicamentos que pueden usarse para el ADHD en adultos incluyen:
En ocasiones, se recomiendan también ciertos antidepresivos. Estos incluyen bupropión (por ejemplo, Wellbutrin) y tricíclicos (por ejemplo, desipramina, imipramina y nortriptilina).
Existen diversos mitos que pueden interferir en la comprensión del ADHD. Es importante entender que el ADHD es una afección médica que se maneja mejor con tratamiento. Es más probable que su hijo controle los síntomas de manera exitosa cuando participa activamente en el tratamiento, por ejemplo, tomando los medicamentos a tiempo.
Hay muchas cosas que puede hacer en casa para ayudar a su hijo con trastorno por déficit de atención con hiperactividad (ADHD, por sus siglas en inglés), y para ayudarse a sí mismo.
En el aula es donde más se exige a los niños que estén sentados quietos, que presten atención, que escuchen y que sigan las normas de la clase. De modo que suelen ser los maestros de la escuela primaria los primeros en reconocer los síntomas de ADHD. Muchas veces, los maestros aconsejan a los padres que sometan a su hijo a una prueba o que consulten con un médico.
La mayoría de los niños con ADHD reúnen los requisitos para acceder a los servicios educativos dentro de las escuelas públicas. Si su hijo reúne los requisitos, usted se reunirá con el personal de la escuela para identificar las metas y planificar un programa educativo individualizado (IEP, por sus siglas en inglés). Por lo general, esto significa que su escuela tratará de adaptarse a las necesidades adicionales de su hijo. Esto puede ser una cuestión menor, como colocar a su hijo adelante en la clase. O puede ser algo más involucrado como proporcionar personal en el aula para que asista a su hijo.
Su médico hablará con usted acerca de establecer metas realistas y que puedan medirse respecto de la conducta de su hijo en la escuela y en el hogar. Las necesidades y los problemas específicos de su hijo deben ser tenidos en cuenta.
La comunicación regular entre padres, maestros y médicos beneficia a un adolescente que tiene ADHD.
Usted tendrá que mantener una relación cercana con su hijo adolescente. Los años de la adolescencia presentan muchos desafíos, tales como aumento de las tareas escolares y la necesidad de estar más atento y organizado. Tomar buenas decisiones se torna especialmente importante durante estos años, cuando aparecen la presión de los compañeros, la sexualidad emergente y otras cuestiones.
Establezca consecuencias que sean significativas para su hijo adolescente. Estas pueden incluir perder privilegios o tener mayores asignaciones de tareas. Los padres y los adolescentes pueden colaborar para establecer metas razonables y que se puedan alcanzar. Y pueden negociar las recompensas cuando se cumplan esas metas.
Los medicamentos se utilizan para ayudar a controlar los síntomas del trastorno por déficit de atención con hiperactividad (ADHD, por sus siglas en inglés): hiperactividad, impulsividad y falta de atención. Los criterios de la Academia Estadounidense de Pediatría (American Academy of Pediatrics o AAP, por sus siglas en inglés) recomiendan medicación y/o terapia conductual para tratar niños que tienen ADHD.nota 4
Los niños deben ser vigilados de cerca cuando empiezan a tomar medicamentos. El médico puede evaluar si su hijo está recibiendo la dosis correcta. Los efectos secundarios suelen disminuir después de unas semanas de estar bajo medicación. O la dosis puede bajarse para compensar los efectos secundarios.
Asegúrese de que el medicamento para el ADHD se tome en forma sistemática. Usted también tendrá que tomar nota de los efectos del medicamento y mantener una comunicación fluida con el médico de su hijo.
Los medicamentos para tratar el ADHD incluyen:
Medicamentos estimulantes
La mayoría de las veces, se utilizan medicamentos estimulantes para tratar ADHD. Estos medicamentos son eficaces para individuos de todas las edades. Pero se necesita más investigación sobre cómo responden los adultos. En general, los medicamentos estimulantes mejoran los síntomas. Suele haber mejoras rápidas y dramáticas en la conducta.
Medicamentos no estimulantes
Si los medicamentos estimulantes tienen efectos secundarios molestos o no son eficaces, el médico de su hijo podría recomendar un medicamento no estimulante como atomoxetina (Strattera), clonidina (Kapvay) o guanfacina (Intuniv). Estos medicamentos pueden usarse solos o en combinación con medicamentos estimulantes.
También se pueden usar medicamentos para tratar otras afecciones de salud mental que suelen ocurrir junto con ADHD. Una de ellas son los trastornos de ansiedad.
Si su hijo está tomando medicamentos para ADHD, tenga en cuenta:
El tratamiento depende de la edad de su hijo. Los niños de edades entre los 4 y los 5 años son tratados primero con terapia conductual. El médico de su hijo hablará con usted acerca de medicamentos si los síntomas de su hijo no mejoran. Los niños de edades entre los 6 y los 11 años son tratados con medicamentos o terapia conductual o con ambos. Los adolescentes de edades entre los 12 y los 18 años son tratados con medicamentos y generalmente también con terapia conductual.
La terapia conductual ayuda a capacitar a los padres, a los maestros y a otros adultos a cargo de un niño con ADHD. Estos programas hacen hincapié en el establecimiento de rutinas y reglas de conducta y en vigilar de cerca cómo responde un niño.
El adulto otorga en forma sistemática recompensas o consecuencias según la manera en la que el niño cumple con las reglas. Se ha demostrado que este tipo de tratamiento es más eficaz que la terapia cognitivo-conductual. Las terapias cognitivas dependen más del hecho de que el niño se ocupe de los cambios de conducta. Es poco probable que un niño con ADHD tenga las habilidades para cambiar su conducta sin la ayuda ni la orientación de los adultos.
Los programas conductuales más utilizados para ayudar a tratar ADHD en un niño incluyen:
La intervención de conducta para adultos se centra en la asistencia relacionada con las habilidades de organización y en las relaciones saludables.
La medicina complementaria es utilizada por algunos terapeutas y otros profesionales de la salud. Estas terapias no han demostrado ser eficaces en el tratamiento del ADHD. Pero una persona con ADHD puede beneficiarse. Por ejemplo, la acupuntura o la biorretroalimentación ("biofeedback") pueden aliviar estrés y la tensión muscular, y mejorar el bienestar general y la calidad de vida de una persona.
Si está pensando en usar terapia complementaria para el ADHD, sea sincero con su médico al respecto. Su médico puede orientarlo a un método que sea seguro en combinación con técnicas comprobadas. Solo deberían utilizarse aquellas terapias que ayudan mejor a controlar los síntomas del ADHD sin causar daños físicos ni emocionales.
Citas bibliográficas
- Greenhill LL, Hechtman LI (2009). Attention-deficit/hyperactivity disorder. In BJ Sadock et al., eds., Kaplan and Sadock's Comprehensive Textbook of Psychiatry, 9th ed., vol. 2, pp. 3560–3572. Philadelphia: Lippincott Williams and Wilkins.
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- American Academy of Child and Adolescent Psychiatry (2007). Practice parameter for the assessment and treatment of children and adolescents with attention-deficit/hyperactivity disorder. Journal of the American Academy of Child and Adolescent Psychiatry, 46(7): 894–921.
- American Academy of Pediatrics (2011). ADHD: Clinical practice guideline for the diagnosis, evaluation, and treatment of attention-deficit/hyperactivity disorder in children and adolescents. Pediatrics, 129(5): 1023–1029.
Revisado: 9 febrero, 2022
Autor: El personal de Healthwise
Evaluación médica:Adam Husney MD - Medicina familiar & Kathleen Romito MD - Medicina familiar & Louis Pellegrino MD - Pediatría del Desarrollo
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