Presenciar un evento traumático puede afectarte física, emocional y mentalmente. Este artículo está dirigido a ayudar a aquellos que han presenciado un evento traumático y a las personas que desean ayudarlos.
El impacto de un evento traumático
Un evento traumático puede afectarte física, emocional y mentalmente. Estos sentimientos son normales y, generalmente, desaparecen en unas semanas. Estos son algunos de los sentimientos que podrías experimentar después de un evento traumático.
- Pensamientos o imágenes repetidas del evento.
- Deseo de mantenerte alejado de la escena del evento y/o miedo a volver al trabajo.
- Dificultad para concentrarte o sensaciones de mareo o confusión.
- Dificultad para realizar tareas o tomar decisiones.
- Deambular con frecuencia o sentarte y quedarte mirando sin dirección.
- Sentimientos de culpabilidad o deseos de haber actuado diferente.
- Deseo de distanciarte de tus familiares, compañeros de trabajo y amigos.
- Pesadillas y/o problemas para dormir.
- Dolores de cabeza u otras reacciones físicas, como dolor de estómago o sentirte cansado todo el tiempo.
- Abuso de alcohol o drogas para aplacar los sentimientos.
Cómo cuidarse después de un evento traumático
Si has pasado o presenciado un evento traumático, estos consejos pueden ser de ayuda.
- Habla con alguien. Hablar sobre el tema quizás te incomode, pero podría ayudar a que te sientas mejor.
- Evita el uso de alcohol o drogas para afrontar la situación.
- Mantente activo. La actividad física es una buena forma de reducir el estrés.
- Come bien y duerme lo suficiente para sentirte descansado. Sentirte saludable físicamente puede ayudar a que te sientas más fuerte emocionalmente.
- Haz algo que disfrutes. Pasa tiempo con tus mascotas. Dedícate a tus hobbies. Haz una escapada a un lugar que te haga sentir mejor.
- Usa tu red de apoyo. Habla con amigos, tu pareja, familiares o un consejero. Hablar del tema es un paso hacia la recuperación.
- Llama al Programa de asistencia al empleado (EAP, por sus siglas en inglés). Habla con un profesional si tus reacciones afectan tu trabajo o vida personal. Consulta a tu empleador o a recursos humanos para asistencia del EAP del empleador.
Cómo ayudar a una persona que experimentó un evento traumático
Puede ser difícil saber qué decir o hacer cuando alguien experimenta un evento traumático. Estas son algunas formas de ayudar en situaciones difíciles.
- Escucha. Haz preguntas respetuosamente. Si la persona parece incómoda, hazle saber que estás disponible cuando lo necesite.
- No tomes las reacciones de la persona (p. ej., ira, aislamiento, irritabilidad, etc.) personalmente. Son todas reacciones normales a un evento traumático.
- Evita frases típicas, como “Sé como te sientes” o “Todo va a estar bien”.
- Sé honesto. Si no sabes qué decir, simplemente dilo.
- Facilita un ambiente seguro. Solo ofréceles tu compañía. Los silencios también pueden ayudar a sanar.
- Deja que llore y se ría. Es parte del proceso de recuperación.
- No trates de solucionarlo. Pasar tiempo juntos es suficiente.
- Baja las expectativas por un tiempo. A aquellos que experimentan un evento traumático a menudo se les hace difícil concentrarse y tomar decisiones. Podrían luchar por mantenerse enfocados y cumplir con sus tareas.
- Ofrécele tu ayuda en cosas simples como hacer parte de su trabajo (con el permiso de su gerente), preparar la cena o hacer trámites.
- Si sientes que esa persona tiene dificultad para superar la situación, dale el número del EAP a través de tu empleador y sugiérele que hable con alguien allí.
Cigna suministra este material únicamente con fines informativos/educativos. No pretende ser un asesoramiento médico o clínico. Solo un profesional de cuidado de la salud puede diagnosticar o recomendar un plan de tratamiento. Para más información sobre tu cobertura de salud del comportamiento, puedes llamar a los teléfonos de servicio al cliente o de salud del comportamiento, que aparecen en tu tarjeta de identificación de cuidado de la salud.