¿CÓMO se debe usar este medicamento?
La presentación del belimumab es en polvo para mezclar en una solución que se inyecta por vía intravenosa (en una vena) en adultos y niños mayores de 5 años. El belimumab también se presenta como solución (líquido) en autoinyector o jeringa prellenada para administrar por vía subcutánea (bajo la piel) en adultos. Cuando se administra por vía intravenosa, un médico o enfermero suele hacerlo una vez cada 2 semanas durante al menos una hora, para las tres primeras dosis, y después una vez cada 4 semanas. Su médico decidirá con qué frecuencia debe recibir el belimumab por vía intravenosa en función de la respuesta de su cuerpo a este medicamento. Cuando se administra por vía subcutánea, por lo general se hace una vez por semana, preferiblemente el mismo día de cada semana.
Recibirá su primera dosis subcutánea de la inyección de belimumab en el consultorio de su médico. Si se administra la inyección de belimumab por vía subcutánea en casa o le pide a un amigo o familiar que le inyecte el medicamento, su médico le mostrará a usted o a la persona que se lo inyecte cómo debe hacerlo. Usted y la persona que inyectará el medicamento también deben leer las instrucciones de uso que vienen con el medicamento.
Saque el autoinyector o la jeringa prellenada del refrigerador y deje que alcance la temperatura ambiente 30 minutos antes de que esté listo para inyectarse el belimumab. No intente calentar el medicamento en un horno de microondas, no lo coloque en agua caliente ni intente usar cualquier otro método. La solución debe ser de transparente a opalescente y entre incolora a amarillo pálido. Llame a su farmacéutico si hay algún problema con el envase o la jeringa, y no se inyecte el medicamento.
Puede administrarse la inyección de belimumab en la parte delantera de los muslos o en cualquier lugar en el estómago, excepto en el ombligo y en el área de 2 pulgadas alrededor de este. No inyecte el medicamento en piel que está sensible, magullada, roja, endurecida o no intacta. Elija un lugar diferente cada vez que se inyecte el medicamento.
El belimumab puede causar reacciones graves durante y después de su administración. Un médico o enfermero le observará de cerca mientras y después de recibir la infusión para estar seguro de que no tiene ninguna reacción grave al medicamento. Es posible que le den otros medicamentos para tratar o ayudar a prevenir reacciones a la inyección de belimumab. Informe inmediatamente a su médico o enfermero si experimenta alguno de los siguientes síntomas que pueden aparecer durante la infusión intravenosa o la inyección subcutánea, o hasta una semana después de recibir el medicamento: erupción cutánea; picazón; urticaria; hinchazón de la cara, ojos, boca, garganta, lengua o labios; dificultad para respirar o tragar; sibilancias o falta de aliento; ansiedad; rubor; mareos; desmayos; dolor de cabeza; náuseas; fiebre; escalofríos; convulsiones; dolor muscular y ritmo cardíaco lento.
El belimumab ayuda a controlar el lupus, pero no lo cura. El médico le dará seguimiento de cerca para saber qué tan bien actúa en usted el belimumab. Puede pasar algún tiempo hasta que sienta todos los beneficios del belimumab. Es importante que le diga a su médico cómo se siente durante el tratamiento.
Su médico o farmacéutico le dará la hoja de información del fabricante para el paciente (Guía del medicamento) cuando inicie su tratamiento con belimumab, y cada vez que vuelva a surtir su receta médica. Lea atentamente la información, y si tiene alguna duda, pregúntele a su médico o farmacéutico. También puede visitar el sitio web de la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA, Food and Drug Administration) http://www.fda.gov/Drugs/DrugSafety/ucm085729.htm o el sitio web del fabricante para obtener la Guía del medicamento.