Generalidades
A medida que envejecemos, nuestra piel se vuelve más delgada y seca, de modo que es más fácil que se dañe. La probabilidad de que la piel se dañe es mayor para las personas que no pueden moverse mucho y que pasan la mayor parte del tiempo en la cama o en una silla de ruedas. Pueden formarse salpullidos y llagas en la piel, especialmente lesiones por presión. Estas lesiones son causadas por la presión constante, la cual puede limitar el riego sanguíneo a la piel.
La piel también puede dañarse por el sudor, las heces o la orina, haciendo que las lesiones por presión sean más probables y más difíciles de curar.
Usted puede ayudar a proteger la piel de la persona que está cuidando, revisándola todos los días y teniendo cuidado con la limpieza de la piel. También es importante tener cuidado al girar a la persona en la cama.
Examine la piel para detectar problemas
Examine la piel de la persona todos los días para ver si hay lesiones por presión, especialmente alrededor de las zonas huesudas. Es más fácil hacer esto cuando ayude a la persona a bañarse y vestirse. Las zonas más comunes para estas lesiones son la parte posterior de la cabeza y las orejas, los hombros, los codos, la parte baja de la espalda, las nalgas y las caderas. También pueden formarse lesiones en la parte interna de las rodillas y en los talones.
Cuando se forme una lesión por presión, la temperatura de la piel podría ser diferente que la de la piel cercana. Puede estar más caliente o más fría. La piel puede sentirse más firme o más blanda que el resto de la piel.
Además, esté atento a salpullidos, especialmente en la zona de la ingle. Esto es muy importante para las personas que tienen problemas para controlar la vejiga o los intestinos y que usan ropa interior de protección para adultos.
Deje que la persona sepa por qué le está examinando la piel. Mantenga el cuerpo de la persona cubierto, excepto en la zona que está revisando. Esto ayudará a que la persona se mantenga caliente y también respetará su dignidad.
Cómo prevenir las lesiones por presión
Usted puede prevenir las lesiones por presión girando cuidadosamente a la persona cada 2 horas. Esto alivia la presión que puede ejercerse en una zona del cuerpo cuando una persona no se mueve durante mucho tiempo.
Déjele saber al médico de la persona si usted ve lesiones por presión. El médico o la enfermera puede darle algunos consejos acerca de cómo tratar las lesiones de menor importancia en el hogar. Las lesiones graves necesitan más tratamiento médico.
Es posible que pueda utilizar dispositivos para ayudar a prevenir las lesiones por presión. Estos incluyen cojines y colchones especiales. Pero no sustituyen el dar la vuelta a la persona.
Mantenga la piel limpia y húmeda
Ayude a bañar a la persona tan a menudo como sea necesario para que esté limpia y cómoda.
- Use un jabón suave.
- Use agua tibia (no caliente).
- Lave suavemente con una toallita.
- Seque la piel con toquecitos suaves de toalla en lugar de frotarla. También puede ofrecer a la persona un albornoz de tela de felpa ("terry cloth"). La tela de felpa es un tipo de tejido que a menudo se utiliza para las toallas. Puede ayudar a secar suavemente la piel.
Use cremas o lociones hidratantes para mantener la piel suave. Si la piel está muy seca, use una crema, loción o pomada protectora de barrera. Estas incluyen lociones de venta libre como CeraVe y TriCeram. Algunas lociones están disponibles con receta.
No aplique cremas hidratantes en dobleces o pliegues de piel, como los que están debajo de los senos (mamas) y en la ingle o el abdomen. Estas zonas ya están húmedas. La humedad adicional puede causar salpullidos e infecciones.
Un humidificador puede ayudar a prevenir la sequedad de la piel. Asegúrese de limpiar el humidificador según las instrucciones. Esto puede prevenir la formación de moho, hongos o bacterias en la máquina.
Siga otros consejos para el cuidado de la piel
- Una buena nutrición y beber mucho líquido ayuda a que la piel se mantenga saludable y a que sane si está dañada. Proporcione una dieta saludable, con muchas proteínas así como frutas y verduras. Ofrezca a la persona mucha agua.
- Cuando lave ropa y sábanas, utilice detergentes suaves. No utilice suavizante para la ropa.
- Trate de que la persona use ropa hecha con telas suaves, como algodón (en lugar de lana).