Generalidades
Algunas personas que beben alcohol, consumen drogas ilegales o usan de manera indebida medicamentos de venta bajo receta o libre pueden llegar a tener un trastorno por consumo de sustancias. Esto significa que una persona usa estas sustancias aun cuando causan daño a la propia persona o a otros.
El trastorno por consumo de sustancias puede variar de leve a grave. Mientras más señales tenga de este trastorno, más grave podría ser. Un trastorno moderado o grave de consumo de sustancias a veces se llama adicción. Las personas que lo tienen pueden tener dificultades para controlar el uso de estas sustancias.
Cuando una persona tiene un trastorno por consumo de sustancias:
- Puede discutir con otros acerca de la cantidad de alcohol o de drogas que consume.
- Su empleo puede verse afectado por su consumo de sustancias.
- Podría consumir alcohol o drogas cuando es peligroso o ilegal, como al conducir.
- Podría tener una fuerte necesidad, o ansias, de consumir alcohol o drogas.
- Puede creer que debe usarla simplemente para poder vivir.
Una persona podría no darse cuenta de que su consumo de sustancias es un problema. Podría no consumir alcohol o drogas en grandes cantidades cuando lo hace. O es posible que pase días o semanas entre los episodios de consumo de alcohol o de drogas. Pero aun si no bebe o consume drogas muy a menudo, su consumo de sustancias podría seguir siendo perjudicial y ponerla en riesgo.
El consumo de alcohol y drogas puede ser un intento inconsciente de autotratarse por otro problema, por ejemplo, la depresión.
Consumir alcohol o drogas puede poner a otros en riesgo. Por ejemplo, una mujer que consume alcohol durante el embarazo pone a su bebé en riesgo de problemas de síndrome de alcoholismo fetal (fetopatía alcohólica). El alcohol puede afectar el crecimiento y el desarrollo de un bebé, así como su comportamiento y capacidad de aprendizaje.
Los niños que están expuestos al consumo de alcohol o drogas en el hogar pueden llegar a tener problemas de salud mental, como depresión y ansiedad. Podrían tener problemas de conducta y dificultades para aprender y no desempeñarse bien en la escuela. Y podrían tener mayores probabilidades de llegar a tener un trastorno por consumo de sustancias.
El alcohol y las drogas pueden afectar el desarrollo cerebral de un adolescente. También pueden afectar el desarrollo afectivo y social. El consumo de alcohol puede causar cambios en la lucidez mental, la percepción, el movimiento, el razonamiento y la atención de un adolescente. Esto puede hacer que les cueste más pensar, aprender, razonar y tomar buenas decisiones.
Las personas que consumen alcohol y drogas pueden tener una mayor inclinación a comportarse de manera arriesgada. Por ejemplo, podrían no usar condones durante las relaciones sexuales. Y podrían tener más de una pareja sexual. Esto aumenta la probabilidad de una persona de tener un embarazo no planeado y de contraer infecciones de transmisión sexual (STI, por sus siglas en inglés), hepatitis B y el virus de inmunodeficiencia humana (VIH). Podrían conducir cuando están bajo los efectos de las drogas o cuando han bebido demasiado. Esto puede aumentar el riesgo de lesiones o accidentes automovilísticos.
Alcohol
El alcohol es parte de la vida de muchas personas. Podría tener un lugar en tradiciones culturales y familiares. Por lo tanto, podría ser difícil saber cuándo alguien está bebiendo demasiado y cuándo es una señal de trastorno por consumo de alcohol. Alguien podría tener un trastorno por consumo de alcohol si tiene dificultades para controlar el consumo y sigue bebiendo alcohol aun cuando tiene efectos perjudiciales en su vida.
Las personas que beben alcohol tienen más probabilidades de tener bajas calificaciones o un mal desempeño laboral. Tienen probabilidades más altas de consumir productos de tabaco y experimentar con drogas ilegales. Y su hábito de bebida puede aumentar su riesgo de resultar heridas o de tener un accidente de auto.
Con el tiempo, beber demasiado alcohol puede causar problemas de salud y de conducta, como presión arterial alta; problemas hepáticos, cardíacos, cerebrales y del sistema nervioso; y problemas con la digestión. También puede causar problemas sexuales, osteoporosis y cáncer.
Consumir alcohol junto con medicamentos o drogas ilegales puede aumentar los efectos de ambas sustancias.
Drogas recreativas e ilegales
Las personas que consumen marihuana o drogas ilegales, como metanfetaminas, cocaína, heroína u otras "drogas de la calle", pueden llegar a tener trastorno por consumo de sustancias. Pueden consumir drogas para estimularse o para aliviar el estrés y problemas emocionales.
Es posible encontrar drogas como el éxtasis (MDMA), la ketamina, el GHB, el Rohypnol y el LSD en los bailes de toda la noche, los "raves", los "trances" o las discotecas. Estas drogas se conocen como "drogas de club". Explican el número creciente de casos de sobredosis y de ingresos en las salas de urgencia. En esos clubes también pueden consumirse inhalantes como óxido nitroso.
Las drogas vienen en diferentes presentaciones y se consumen de diversas formas. Pueden fumarse, aspirarse, inhalarse o tomarse en forma de pastillas. Pueden ponerse en bebidas o comidas. Pueden introducirse por el recto o la vagina o inyectarse con una aguja. En situaciones en que se consumen drogas, los adolescentes y los adultos jóvenes pueden correr el riesgo de ser víctimas de agresión sexual o de conducta violenta.
Medicamentos de venta bajo receta y de venta libre
Algunas personas usan de manera indebida medicamentos de venta bajo receta, como los opioides (como OxyContin y Norco), benzodiazepinas (como Valium y Xanax) y estimulantes (como Ritalin y Adderall). El uso indebido de medicamentos de venta bajo receta puede causar daños graves y, en algunos casos, incluso la muerte.
Algunos medicamentos de venta libre, como los medicamentos para el resfriado que contienen dextrometorfano, los usan los adolescentes y jóvenes adultos como una manera de estimularse.
Productos de uso doméstico
El pegamento, el betún, los líquidos limpiadores y los aerosoles son productos domésticos con ingredientes que también se pueden usar para drogarse.