Cómo comer cuando tiene enfermedad inflamatoria intestinal
No hay una dieta adecuada para todas las personas con enfermedad inflamatoria intestinal. Es posible que los alimentos que le causan molestias a una persona no le causen molestias a otra. Su dieta tiene que ser elaborada a su medida. Sin embargo, las siguientes ideas básicas pueden ayudarle a sentirse mejor y a obtener la nutrición que necesita.
Encuentre los alimentos que le causan problemas
Los alimentos comunes que causan problemas a muchas personas incluyen:
- Los productos lácteos para quienes tienen intolerancia a la lactosa.
- Los alimentos ricos en fibra, como las frutas y verduras crudas, y los granos integrales. A menudo, las personas tienen más problemas con alimentos que producen gases. Entre estos se incluyen los frijoles (habichuelas), la col (berza), el brócoli y las cebollas, así como alimentos con cáscaras, como las semillas, las nueces y el maíz.
- Los alimentos ricos en grasa, como los alimentos fritos, la mantequilla y la margarina, la mayonesa, la mantequilla de cacahuate (maní), las nueces, el helado y los cortes grasos de carne roja.
- Los alimentos picantes.
- Los alimentos con cafeína, como el chocolate y el café.
- Las bebidas carbonatadas.
- El alcohol.
Averigüe qué alimentos le causan problemas llevando un diario de alimentos. Tan pronto como sepa qué alimentos empeoran sus síntomas, su médico o su dietista pueden ayudarle a planificar una dieta que evite los alimentos que le causan problemas pero que le proporcione abundantes nutrientes y suficientes calorías para mantenerlo en un peso saludable.
Para preparar un diario de alimentos, obtenga un pequeño cuaderno y llévelo consigo. Tome notas después de cada comida o refrigerio.
- En el lado izquierdo de la página, anote lo que comió, aproximadamente cuánto y a qué hora. Sea honesto, anote todo.
- En el lado derecho de la página, anote cualquier síntoma que haya tenido y a qué hora ocurrió.
Si observa que determinados alimentos empeoran sus síntomas, hable con su médico acerca de estos alimentos en su próxima visita.
Elija alimentos en forma inteligente
Durante una crisis, evite o reduzca los alimentos que empeoran los síntomas. Sin embargo, en lugar de suprimir todo un grupo de alimentos altos en nutrientes, intente reemplazarlos con opciones saludables.
- Elija productos lácteos bajos en lactosa, por ejemplo, yogur o quesos duros, como el queso cheddar. O pruebe beber leche reducida en lactosa.
- Si tiene grasa en las heces, elija alimentos bajos en grasa en lugar de elegir los altos en grasa. Por ejemplo, algunos cortes de carne roja tienen mucha grasa. Una elección baja en grasa sería la carne de res magra (como lomo (sirloin), pulpa negra y pulpa blanca (top and bottom round), espaldilla (chuck) o hamburguesa magra dietética), aves o pescado, como el bacalao. En lugar de freír los alimentos, pruebe hornearlos o asarlos.
- Cocine las frutas y las verduras sin las cáscaras, piel ni semillas. Pruebe diferentes formas de prepararlas, como al vapor, guisarlas u hornearlas. Pele y quite las semillas de las frutas y de las verduras frescas si estas le causan molestias o elija variedades enlatadas.
Obtenga las calorías y los nutrientes que necesita
Es posible que el cuerpo no pueda absorber todos los nutrientes que necesita de los alimentos que come. Para mantenerse lo más saludable posible:
- Siga una dieta variada y nutritiva, que sea alta en calorías y proteínas.
- Intente comer 3 comidas más 2 o 3 refrigerios al día. Es posible que sea más fácil obtener más calorías si divide su consumo de alimentos a lo largo del día.
- Tome suplementos de minerales y vitaminas si su médico se los recomienda.
- Intente agregar suplementos líquidos altos en calorías, como Ensure Plus o Boost Plus, si tiene problemas para mantener su peso.
- Beba abundante líquido. Esto puede ayudarle a evitar la deshidratación, los problemas en los riñones y los cálculos biliares.
- Consulte a su médico o dietista si siente que su dieta es demasiado limitada o si está bajando de peso.