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Hemodiálisis
Hemodiálisis
Generalidades del tratamiento
La enfermedad renal crónica y la lesión renal aguda (también conocida como insuficiencia renal aguda) hacen que los riñones pierdan su capacidad para filtrar y eliminar los desechos y el exceso de líquido del cuerpo. La hemodiálisis es un proceso que utiliza una membrana artificial (dializador) para:
- Eliminar desechos, como urea, de la sangre.
- Restaurar el equilibrio adecuado de electrolitos en la sangre.
- Eliminar el exceso de líquido del organismo.
La hemodiálisis para la lesión renal aguda puede hacerse a diario hasta que los riñones funcionen nuevamente.
Lo conectan a un filtro (dializador) mediante tubos conectados a sus vasos sanguíneos. La sangre se bombea lentamente desde su cuerpo hasta el dializador, donde se eliminan los productos de desecho y el exceso de líquido. Después de esto, la sangre filtrada es bombeada de regreso al cuerpo.
Existen distintos tipos de hemodiálisis. Puede hacerse en un hospital o centro o en el hogar. Si es en el hogar, puede hacerse la diálisis usted mismo, a menudo con la ayuda de un amigo o integrante de su familia. Usted tiene opciones en cuanto a la duración o la frecuencia con que se la hace. También puede hacerse durante la noche. Hable acerca de estas con su médico para decidir cuál podría ser mejor para usted.
Acceso
Antes de poder comenzar los tratamientos, su médico tendrá que crear un sitio en el que la sangre pueda entrar y salir de su cuerpo durante las sesiones de diálisis. Esto se conoce como el acceso de diálisis. El tipo de acceso de diálisis que le hagan dependerá en parte de la rapidez con que necesite comenzar la diálisis.
Existen diferentes tipos de accesos de hemodiálisis:
- Una fístula conecta una arteria con una vena en el brazo. Podría llevar varios meses hasta que se forme.
- Un injerto es un pequeño tubo que conecta la arteria y la vena. No dura tanto como una fístula.
- Un catéter venoso es un tubo que se coloca en el cuello o el pecho. Se usa por un corto tiempo solamente.
Cosas a considerar
- La hemodiálisis la realizan principalmente trabajadores de salud capacitados. Estos pueden ver si se presentan problemas.
- Usted puede hacerla en un centro donde otras personas están haciendo diálisis. Esto puede ayudar a brindar apoyo emocional.
- Usted puede programar sus tratamientos en horario nocturno y tal vez en su casa. Esto le da más control sobre sus horarios.
- Generalmente debe hacerse a un horario fijo al menos 3 veces a la semana.
- Puede causar efectos secundarios, como presión arterial baja y calambres musculares. Estos a menudo pueden tratarse fácilmente.
- Requiere un pinchazo de aguja en cada tratamiento. Esto es molesto para algunas personas. Otras se acostumbran y pueden hacerlo ellas mismas.
Qué esperar
Qué esperar
Le harán análisis de sangre aproximadamente una vez al mes para asegurarse de que está recibiendo la cantidad adecuada de hemodiálisis. Estas pruebas se hacen para ayudar a determinar lo bien que la hemodiálisis está funcionando. Se registrará su peso antes y después de cada sesión, al igual que la cantidad de tiempo que tome completar la sesión de diálisis. Si se hace hemodiálisis en el hogar, tendrá que llevar registros de su peso antes y después de cada sesión y de la duración de cada sesión.
Sepa más
- Dialysis: Measuring How Well It Works
Por qué se hace
Por qué se hace
Con frecuencia se comienza a hacer hemodiálisis después de que se hayan presentado síntomas o complicaciones de insuficiencia renal. Estos pueden incluir:
- Síntomas de síndrome urémico, como náuseas, vómitos, pérdida de apetito y fatiga.
- Confusión leve.
- Señales, como la hinchazón, de que los riñones son incapaces de eliminar del organismo el exceso de líquidos ingeridos diariamente.
- Altos niveles de potasio en la sangre (hiperpotasiemia).
- Altos niveles de ácido en la sangre (acidosis).
La hemodiálisis a veces se usa cuando se produce una lesión renal aguda. La diálisis se utiliza siempre con mucha precaución en personas que tienen lesión renal aguda, porque en ocasiones la diálisis puede provocar presión arterial baja, ritmos cardíacos irregulares (arritmias) y otros problemas que pueden empeorar la lesión renal aguda.
Eficacia
Eficacia
La hemodiálisis no reemplaza completamente la función renal normal. No revierte la enfermedad renal crónica ni la insuficiencia renal. La hemodiálisis solo proporciona hasta un 10% de la función renal normal. Por esta razón, es importante que tome sus medicamentos según las indicaciones y que siga su plan de alimentación.
La diálisis a veces se usa para tratar una lesión renal aguda. Puede usarse si los problemas con los líquidos y electrolitos causan síntomas graves u otros problemas. Algunas personas que tienen lesión renal aguda continúan dependiendo de la hemodiálisis y llegan a tener insuficiencia renal.
Riesgos
Riesgos
La mayoría de las complicaciones que ocurren durante la diálisis pueden prevenirse o controlarse con facilidad si a usted se le hace un seguimiento cuidadoso durante cada sesión de diálisis. Las posibles complicaciones pueden incluir:
- Presión arterial baja (hipotensión). Este es el tipo de complicación más común de la hemodiálisis.
- Calambres musculares.
- Latido cardíaco irregular (arritmia).
- Náuseas, vómitos, dolores de cabeza o confusión (desequilibrio dialítico).
- Infección, en particular si se usa un dispositivo de acceso vascular central (CVAD, por sus siglas en inglés) para la hemodiálisis.
- Formación de un coágulo de sangre (trombo) en el CVAD o cerca de este.
- Complicaciones técnicas, como aire atrapado (émbolo) en el tubo de diálisis.
Las complicaciones de la diálisis a largo plazo pueden incluir:
- Filtración inadecuada de los productos de desecho (inadecuación de hemodiálisis).
- Formación de un coágulo de sangre (trombosis) en el injerto o la fístula para la diálisis.
- Enfermedad cardiovascular (enfermedad cardíaca, enfermedad de los vasos sanguíneos o ataque cerebral).
Revisado: 11 octubre, 2023
Autor: El personal de Ignite Healthwise, LLC
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