Prevención
Usted puede tomar medidas para reducir el riesgo de contagiarse con una infección de transmisión sexual (STI, por sus siglas en inglés). También puede reducir el riesgo de transmitirle una STI a su pareja sexual.
Posponga la actividad sexual hasta que esté preparado tanto física como emocionalmente para tener relaciones sexuales. Casi dos tercios de todas las STI ocurren en personas menores de 25 años. Los adolescentes sexualmente activos tienen alto riesgo de contraer una STI ya que con frecuencia tienen relaciones sin protección y tienen numerosas parejas. Los cambios biológicos durante la adolescencia también pueden aumentar su riesgo de contraer una STI.
Asegúrese de que sus vacunas están al día. Puede aplicarse la vacuna contra la hepatitis A, la hepatitis B y el VPH para prevenir estas infecciones. La vacuna contra el VPH (virus del papiloma humano) protege contra el VPH. Hay muchos tipos de VPH. Algunos tipos de este virus pueden causar verrugas genitales. Otros tipos pueden provocar cáncer de cuello uterino o cáncer de la boca y algunos tipos de cáncer poco comunes, como cáncer vaginal y anal. La vacuna contra el VPH protege contra los tipos más comunes de VPH que pueden causar problemas graves. Para obtener más información, vea el tema Vacunaciones.
Las STI constituyen una preocupación a nivel mundial. Es importante tener relaciones sexuales más seguras con todas las parejas, especialmente si usted o ellas tienen comportamientos sexuales de alto riesgo.
Es especialmente importante que las mujeres embarazadas que corren riesgo de contraer una STI tengan relaciones sexuales más seguras, debido a que una STI puede afectar a su bebé (feto). Es posible que una STI ponga en peligro la vida de su bebé o cause problemas o discapacidades graves a largo plazo para su bebé.
Practique relaciones sexuales más seguras
Prevenir una infección de transmisión sexual (STI) es más fácil que tratar una infección después de que esta ocurre.
- Hable con su pareja sobre las STI antes de iniciar una relación sexual. Averigüe si su pareja corre el riesgo de tener una STI. Recuerde que es muy posible estar infectado con una STI sin saberlo. Puede demorar hasta 6 meses detectar algunas STI en la sangre, como el VIH. Haga las siguientes preguntas a su pareja:
- ¿Cuántas parejas sexuales ha tenido?
- ¿Qué conductas de alto riesgo tiene?
- ¿Ha tenido alguna vez una STI?
- ¿Se la trató y se la curó?
- Si la STI no es curable, ¿cuál es la mejor forma de protegerse?
- Sea responsable.
- Evite el contacto o actividad sexuales si tiene síntomas de una STI o está en tratamiento por una STI.
- Evite el contacto o actividad sexuales con cualquier persona que tenga síntomas de una STI o que pueda haber estado expuesta a una STI.
- No tenga más de una pareja sexual a la vez. El riesgo de contraer una STI aumenta si tiene varias parejas sexuales al mismo tiempo.
- Algunas STI también pueden propagarse a través del contacto sexual bucal-genital o genital-anal.
- Absténgase del coito para prevenir cualquier exposición a las STI.
Uso del condón
Los condones pueden protegerle contra las infecciones de transmisión sexual (STI). Aunque esté protegida contra el embarazo usando píldoras anticonceptivas u otro método, use un condón para prevenir las STI.
Uso del condón masculino
Usar condones reduce el riesgo de infectarse con la mayoría de las STI, especialmente si los condones se usan correctamente y en forma sistemática. Los condones deben estar colocados antes de iniciar cualquier contacto o actividad sexuales. Use condones con una nueva pareja sexual hasta estar seguro de que no tiene una STI.
Los condones están hechos de látex (caucho), de poliuretano o de intestinos de oveja. Los condones de látex y de poliuretano ayudan a prevenir el contagio de infecciones de transmisión sexual (STI, por sus siglas en inglés) como el VIH, pero los condones de intestino de oveja no lo hacen.
- Use un lubricante a base de agua, como K-Y Jelly, para ayudar a prevenir un desgarro de la piel si falta lubricación con el uso de un condón durante las relaciones sexuales. Los desgarros pequeños en la vagina durante las relaciones sexuales vaginales o en el recto durante relaciones sexuales anales permiten que las STI ingresen en la sangre.
- No use vaselina como lubricante con condones, debido a que disuelve el látex de los condones.
- Use un condón masculino para tener relaciones sexuales vaginales o anales.
Uso del condón femenino
Aun si usted usa otro método anticonceptivo para prevenir un embarazo, es recomendable que use condones para reducir el riesgo de contraer una STI. Los condones femeninos están disponibles para las mujeres cuyas parejas no tienen o no quieren usar un condón masculino.
Los condones no previenen el contacto de la piel con la llaga de la zona genital; por lo tanto, es posible propagar una STI con el contacto genital. Es importante que se evalúe cualquier síntoma presente en la zona genital.
Las barreras bucales, como un protector bucal de látex, pueden usarse para reducir el contagio de la infección a través de la actividad sexual oral. Puede hablar al respecto con su dentista o profesional de la salud.
Si es mujer, evite el lavado vaginal, porque puede cambiar el equilibrio normal de los organismos presentes en la vagina y aumenta el riesgo de tener una STI.
Uso de espermicidas
La mayoría de los espermicidas contienen una sustancia química que se llama nonoxinol-9 (N9). La Administración de Alimentos y Medicamentos de los EE. UU. (U.S. Food and Drug Administration o FDA, por sus siglas en inglés) advierte que el N9 en anticonceptivos vaginales y espermicidas puede causar la irritación del recubrimiento de la vagina o del recto. Esto puede aumentar el riesgo de contraer el VIH de una pareja infectada.
De manera que aunque usar un espermicida con un condón es más eficaz como método anticonceptivo, usar un espermicida puede aumentar su riesgo de contraer VIH.