Conceptos básicos de la afección
¿Qué es el pie zambo?
Pie zambo es un término general utilizado para describir una serie de posiciones anormales del pie. Cada una de las siguientes características puede estar presente, y cada una puede variar de leve a grave:
- El pie (especialmente el talón) suele ser más pequeño de lo normal.
- El pie puede apuntar hacia abajo.
- La parte delantera del pie puede girarse hacia el otro pie.
- El pie puede girarse hacia dentro y, en casos extremos, la planta del pie puede apuntar hacia arriba.
La mayoría de los tipos de pie zambo están presentes al nacer (pie zambo congénito). El pie zambo puede producirse en un pie o en ambos. En casi la mitad de los bebés afectados, están implicados ambos pies.
Aunque el pie zambo no es doloroso en un bebé, el tratamiento debe comenzar inmediatamente. El pie zambo puede causar problemas importantes a medida que el niño crece. Pero con un tratamiento temprano la mayoría de los niños que nacen con pie zambo pueden llevar una vida normal.
¿Cuál es la causa del pie zambo?
No se entienden bien todas las causas del pie zambo. Puede desarrollarse debido a la posición del bebé mientras crece en el útero de la madre. Tener otras afecciones de salud como espina bífida también puede causar el pie zambo. También puede ser el resultado de problemas que afectan los sistemas nervioso, muscular y óseo, como un ataque cerebral o una lesión cerebral. Es posible que poco después del nacimiento le hagan pruebas a su bebé para detectar algunos de estos problemas.
¿Cuáles son los síntomas del pie zambo?
El pie zambo puede presentar muchos síntomas, que pueden variar de leves a graves:
- El pie, especialmente el talón, a menudo es más pequeño de lo normal.
- El pie podría apuntar hacia abajo.
- La punta del pie podría girar hacia el otro pie.
- El pie podría girar hacia adentro, y en casos extremos, la planta del pie puede apuntar hacia arriba.
El pie zambo no causa dolor en un bebé. Pero la pierna afectada puede ser más corta y más pequeña que la otra. Estos síntomas se hacen más evidentes y suponen un mayor problema a medida que el niño crece. Su hijo podría tener problemas para jugar como otros niños a causa del pie zambo. Y su hijo puede tener problemas para caminar y encontrar zapatos que le queden bien. Un tratamiento que comience poco después del nacimiento puede ayudar a superar estos problemas.
¿Cómo se diagnostica?
Una ecografía realizada antes de que nazca su bebé a veces puede detectar el pie zambo. Es más habitual que el médico diagnostique la afección después del nacimiento del niño basándose en el aspecto y el movimiento de los pies y las piernas. En algunos casos, sobre todo si el pie zambo se debe solo a la posición del bebé en crecimiento antes del nacimiento (pie zambo postural), el pie es flexible y puede moverse a una posición normal o casi normal después de que nazca el bebé. En otros casos, el pie está más rígido y los músculos de la parte posterior de la pantorrilla están muy tensos.
¿Cómo se trata el pie zambo?
El tratamiento comienza poco después del nacimiento. Es posible que el médico primero trate de colocar un yeso o una tablilla en el pie o los pies. Esto significa que el pie (o los pies) se colocan en la posición más normal y se mantienen en esa posición hasta el siguiente tratamiento. El tratamiento se repite cada pocas semanas durante varias semanas. Se mueve el pie a una posición cada vez más cercana a la normal en cada visita.
El médico podría operar si el yeso o la tablilla no funcionan o si el pie está muy desviado. Las cirugías más comunes reparan ligamentos y tendones, como el del talón (tendón de Aquiles). Tras la cirugía, un aparato ortopédico mantiene el pie en su sitio mientras se cura. Es posible que su hijo reciba fisioterapia.
