Prevención del cáncer de mama
Evitar factores de riesgo y aumentar los factores de protección ayuda a prevenir el cáncer.
Evitar los factores de riesgo del cáncer, como fumar, tener sobrepeso y no hacer suficiente ejercicio quizá ayude a prevenir ciertos tipos de cáncer. Es posible que aumentar los factores de protección, como dejar de fumar y hacer ejercicio, también ayude a prevenir algunos tipos de cáncer. Consulte con su médico u otro profesional de atención de la salud sobre las formas de disminuir el riesgo de cáncer.
El NCI elaboró una herramienta en inglés para evaluar el riesgo de cáncer de mama (Breast Cancer Risk Assessment Tool). Mediante preguntas sobre los factores de riesgo de una mujer se calcula el riesgo de cáncer de mama en los próximos 5 años, y hasta los 90 años. Esta herramienta en línea está diseñada para que la use un proveedor de atención de la salud. Para obtener más información sobre el riesgo de cáncer de mama, llame al 1-800-4-CANCER.
Los siguientes son factores de riesgo del cáncer de mama:
Edad avanzada
Además de ser mujer, la edad avanzada es el factor de riesgo principal para el cáncer de mama. La probabilidad de presentar cáncer de mama aumenta a medida que una mujer envejece. Una mujer de 30 años tiene una probabilidad de 1 en 200 de recibir un diagnóstico de cáncer de mama en los próximos 10 años, mientras que una mujer de 70 años tiene una probabilidad de 1 en 25.
Las mujeres de 50 a 69 años que se someten a mamografías de detección tienen una probabilidad más baja de morir por cáncer de mama que las mujeres que no se someten a dichos exámenes. La detección mediante mamografía disminuye la mortalidad por cáncer de mama, ya que se identifican los casos que requieren tratamiento en un estadio más temprano.
Antecedentes personales de cáncer de mama o enfermedad benigna de la mama (no cancerosa)
Las mujeres con cualquiera de las siguientes características tienen un mayor riesgo de cáncer de mama:
- Antecedentes personales de cáncer de mama invasivo, carcinoma ductal in situ (CDIS) o carcinoma lobulillar situ (CLIS).
- Antecedentes personales de enfermedad de la mama benigna (no cancerosa).
Riesgo heredado de cáncer de mama
Las mujeres con antecedentes familiares de cáncer de mama en un familiar de primer grado (madre, hermana o hija) tienen un aumento de riesgo de cáncer de mama.
Las mujeres con cambios heredados en los genes BRCA1 y BRCA2, o en ciertos otros genes tienen un riesgo más alto de cáncer de mama. El riesgo de cáncer de mama causado por cambios heredados en los genes depende del tipo de mutación génica, los antecedentes familiares de cáncer y otros factores.
Tejido de la mama denso
Tener tejido de la mama que es denso en una mamografía es un factor de riesgo del cáncer de mama. El grado de riesgo depende de la densidad del tejido mamario. Las mujeres con mamas muy densas tienen un riesgo más alto de cáncer que las mujeres con mamas menos densas.
Una mayor densidad mamaria es, con frecuencia, un rasgo heredado, pero también se presenta en mujeres que no han tenido hijos, que tuvieron su primer embarazo tarde en la vida, que toman hormonas durante la posmenopausia o que consumen bebidas alcohólicas. Para obtener más información, consulte Mamas densas: respuestas a las preguntas más frecuentes.
Mayor exposición al estrógeno como consecuencia de los antecedentes de reproducción
El estrógeno es una hormona que elabora el cuerpo y ayuda a desarrollar y mantener las características sexuales femeninas. La exposición al estrógeno durante un tiempo prolongado aumenta el riesgo de cáncer de mama. Las concentraciones de estrógeno son más altas durante los años en que la mujer tiene la menstruación.
Los siguientes factores en los antecedentes obstétricos de una mujer aumentan el tiempo de exposición del tejido de la mama al estrógeno y es posible que esto aumente el riesgo de cáncer de mama:
- Menstruación prematura: el comienzo de los periodos menstruales antes de los 12 años aumenta el número de años de exposición del tejido de la mama al estrógeno.
- Menopausia que se inicia a mayor edad: cuanto más años menstrúa una mujer, más tiempo está expuesto el tejido de la mama al estrógeno.
- Mayor edad en el momento del parto del primer hijo o nunca haber tenido partos: el embarazo reduce el número de ciclos menstruales que una mujer tiene durante la vida. El tejido de la mama está expuesto a mayor estrógeno por más tiempo en las mujeres que quedan embarazadas por primera vez después de los 35 años o que nunca quedaron embarazadas.
Terapia hormonal para los síntomas de menopausia
Las hormonas, como el estrógeno y la progesterona, se pueden producir en forma de píldoras en un laboratorio. El estrógeno, la progestina o ambos se administran para reemplazar el estrógeno que ya no producen los ovarios en las mujeres posmenopáusicas, o en aquellas a las que se les extirparon los ovarios. Esto se llama terapia de reemplazo hormonal (TRH) o terapia con hormonas (TH). La terapia de estrógeno que comienza cerca del momento de la menopausia se relaciona con un aumento del riesgo de cáncer de mama. La terapia de estrógeno que comienza en el momento de la menopausia, o después de esta, se relaciona con un aumento del riesgo de presentar cáncer de endometrio y enfermedad cardiovascular total, sobre todo ictus. La TH combinada contiene estrógeno y progestina. Este tipo de terapia hormonal para la menopausia aumenta el riesgo de cáncer de mama. Hay estudios que muestran que cuando las mujeres dejan de tomar estrógeno combinado con progestina, disminuye su riesgo de cáncer de mama.
Radioterapia dirigida a la mama o el pecho
La radioterapia dirigida al pecho para el tratamiento del cáncer aumenta el riesgo de cáncer de mama a los 10 años del tratamiento. El riesgo de cáncer de mama depende de la dosis de radiación y de la edad en que se administre. El riesgo es más alto si el tratamiento con radiación se administró durante la pubertad, cuando las mamas se empiezan a formar.
La radioterapia para tratar el cáncer en una mama no parece aumentar el riesgo de cáncer en la otra mama.
La exposición a la radiación, como las radiografías del tórax, puede aumentar aún más el riesgo de cáncer de mama en las mujeres que heredaron cambios en los genes BRCA1 y BRCA2; en particular, en las mujeres que recibieron rayos X antes de los 20 años.
Obesidad
La obesidad aumenta el riesgo de cáncer de mama, particularmente en las mujeres posmenopáusicas que no se sometieron a terapia de remplazo hormonal.
Consumo de bebidas alcohólicas
El consumo de bebidas alcohólicas aumenta el riesgo de cáncer de mama. El grado de riesgo se incrementa a medida que aumenta el consumo de alcohol.
Los siguientes son factores de protección del cáncer de mama:
Menor exposición al estrógeno como consecuencia de los antecedentes de reproducción
Los antecedentes de reproducción de una mujer a veces afectan el tiempo de exposición del tejido de la mama al estrógeno. El inicio temprano de la menstruación, el inicio tardío de la menopausia, tener el primer embarazo a una mayor edad y nunca haber tenido un embarazo son factores asociados con el aumento de la exposición al estrógeno y con el riesgo de cáncer de mama. Los siguientes factores de la reproducción de una mujer disminuyen el tiempo de exposición del tejido de la mama al estrógeno y es posible que prevengan el cáncer de mama:
- Embarazo temprano: las concentraciones de estrógeno son más bajas en el embarazo. En un estudio, las mujeres con un embarazo a término antes de los 20 años presentaron un riesgo más bajo de cáncer de mama que quienes no habían tenido hijos o que habían tenido su primer hijo después de los 35 años.
- Lactancia: las concentraciones de estrógeno permanecen más bajas mientras la mujer amamanta. Las mujeres que amamantan tienen un riesgo más bajo de cáncer de mama que quienes tuvieron hijos, pero no los amamantaron.
Tomar moduladores selectivos de los receptores de estrógeno o inhibidores e inactivadores de la aromatasa
Moduladores selectivos de los receptores de estrógeno
El tamoxifeno y el raloxifeno pertenecen a la familia de medicamentos llamados moduladores selectivos del receptor de estrógeno (MSRE). Los MSRE actúan como estrógeno en algunos tejidos del cuerpo, pero impiden los efectos del estrógeno en otros tejidos.
El tratamiento con tamoxifeno disminuye el riesgo de cáncer de mama positivo para el receptor de estrógeno (ER+) y carcinoma ductal in situ en las mujeres premenopáusicas y posmenopáusicas en riesgo alto. El tamoxifeno también se usa para el tratamiento del cáncer de mama metastásico y para prevenir que el cáncer recidive después de una cirugía para extirpar tumores de mama. El tratamiento con raloxifeno también disminuye el riesgo de cáncer de mama en mujeres posmenopáusicas. Con cualquiera de estos medicamentos, la reducción del riesgo dura varios años luego de suspenderse el tratamiento. Se han observado tasas más bajas de fracturas de huesos en las pacientes que toman raloxifeno.
El uso del tamoxifeno aumenta el riesgo de sofocos, cáncer de endometrio, derrame cerebral, cataratas y coágulos de sangre, (en especial, en los pulmones y las piernas). El riesgo de presentar estos problemas aumenta mucho en las mujeres mayores de 50 años en comparación con las mujeres más jóvenes. Las mujeres menores de 50 años con un riesgo alto de cáncer de mama son las que más se benefician del tamoxifeno. El riesgo de cáncer de endometrio dura 5 años luego de suspender el tamoxifeno, pero el riesgo de presentar cataratas o coágulos de sangre no dura mucho. Consulte con su médico sobre los riesgos y beneficios de este medicamento.
Tomar raloxifeno aumenta el riesgo de coágulos de sangre en los pulmones y las piernas, pero no parece aumentar el riesgo de cáncer de endometrio. En las mujeres posmenopáusicas con osteoporosis (reducción de la densidad ósea), el raloxifeno disminuye el riesgo de cáncer de mama en las mujeres con riesgo alto o bajo de esta enfermedad. No se sabe si el raloxifeno tendría el mismo efecto en las mujeres sin osteoporosis. Hable con su médico sobre los riesgos y beneficios de tomar este medicamento.
Hay otros MSRE que están en estudio en ensayos clínicos.
Inhibidores e inactivadores de la aromatasa
Los inhibidores de la aromatasa (anastrozol, letrozol) y los inactivadores de la aromatasa (exemestano) disminuyen el riesgo de recidiva o de un cáncer de mama nuevo en las mujeres con antecedentes de cáncer de mama. Los inhibidores de la aromatasa también disminuyen el riesgo de cáncer de mama en las mujeres con las siguientes afecciones:
- Mujeres posmenopáusicas con antecedentes personales de cáncer de mama.
- Mujeres sin antecedentes personales de cáncer de mama de 60 años o más, con antecedentes de carcinoma ductal in situ con mastectomía o con riesgo alto de cáncer de mama según la herramienta del modelo de Gail (una herramienta para calcular el riesgo de cáncer de mama).
En las mujeres con mayor riesgo de cáncer de mama, el uso de inhibidores de la aromatasa disminuye la cantidad de estrógeno que produce el cuerpo. Antes de la menopausia, los ovarios y otros tejidos del cuerpo de la mujer producen estrógeno, incluso el encéfalo, el tejido graso y la piel. Después de la menopausia, los ovarios dejan de producir estrógeno, pero los otros tejidos no lo hacen. Los inhibidores de la aromatasa impiden la acción de una enzima que se llama aromatasa, que se usa para producir todo el estrógeno del cuerpo. Los inactivadores de la aromatasa impiden que la enzima funcione.
Los posibles daños por tomar inhibidores de la aromatasa incluyen dolor en los músculos y las articulaciones, osteoporosis, sofocos y sensación de mucho cansancio.
Mastectomía para disminuir el riesgo o profiláctica
Es posible que algunas mujeres que tienen un riesgo alto de cáncer de mama decidan someterse a una mastectomía para disminuir el riesgo o una mastectomía profiláctica (extirpación de una o ambas mamas cuando no hay signos de cáncer). Después de la cirugía, el riesgo de cáncer de mama disminuye mucho más en estas mujeres y la mayoría sienten menos ansiedad por su riesgo de presentar esta enfermedad. Después de un diagnóstico de cáncer en una mama, algunas mujeres deciden extirpar la mama sana al mismo tiempo que la mama con cáncer. Esto se llama mastectomía profiláctica contralateral. Sin embargo, es muy importante someterse a una evaluación del riesgo de cáncer y recibir orientación sobre las diferentes maneras de prevenir el cáncer de mama antes de tomar cualquier decisión relacionada con la cirugía.
Ablación ovárica
Los ovarios elaboran la mayor parte de los estrógenos que produce el cuerpo. Los tratamientos que detienen o disminuyen la cantidad de estrógeno producido por los ovarios son cirugía para extirpar los ovarios, radioterapia o tomar ciertos medicamentos. Esto se llama ablación ovárica.
Las mujeres premenopáusicas con riesgo alto de cáncer de mama debido a ciertos cambios en los genes BRCA1 y BRCA2 pueden decidir someterse a una ooforectomía para disminuir el riesgo (la extirpación de ambos ovarios cuando no hay signos de cáncer). Esto disminuye la cantidad de estrógeno que produce el cuerpo y reduce el riesgo de cáncer de mama. La ooforectomía para disminuir el riesgo también disminuye el riesgo de cáncer de mama en mujeres premenopáusicas con riesgo promedio y en mujeres con un riesgo más alto de cáncer de mama debido a la radiación dirigida al tórax. Sin embargo, es muy importante someterse a una evaluación del riesgo de cáncer y recibir orientación antes de tomar esta decisión. La disminución repentina de las concentraciones de estrógeno puede causar el inicio de los síntomas de la menopausia. Estos incluyen sofocos, problemas para dormir, ansiedad y depresión. Los efectos a largo plazo comprenden la disminución del deseo sexual, la sequedad vaginal y la disminución de la densidad ósea.
Hacer suficiente ejercicio
Las mujeres que hacen ejercicio físico tienen un riesgo más bajo de cáncer de mama.
No está claro si lo siguiente afecta el riesgo de cáncer de mama:
Anticonceptivos hormonales
Los anticonceptivos hormonales contienen estrógeno o estrógeno y progestina. En algunos estudios se observó que las mujeres que consumen anticonceptivos hormonales en la actualidad o que recién empezaron a tomarlos tienen un ligero aumento de riesgo de presentar cáncer de mama. En otros estudios no se observó un aumento de riesgo de cáncer de mama en mujeres que usan anticonceptivos hormonales.
En un estudio se observó que el riesgo de cáncer de mama aumenta ligeramente cuando una mujer usa anticonceptivos hormonales durante más tiempo. En otro estudio se observó que, con el tiempo, el ligero aumento de riesgo de cáncer de mama disminuyó cuando las mujeres dejaron de usar anticonceptivos hormonales.
Se necesitan más estudios para determinar si los anticonceptivos hormonales influyen en el riesgo de presentar cáncer de mama en la mujer.
Sustancias químicas en el ambiente
Los científicos estudian si la exposición a sustancias químicas en el ambiente aumenta el riesgo de cáncer de mama en la mujer. Los estudios de este tipo son difíciles de llevar a cabo y de interpretar por diferentes motivos, como los siguientes:
- Es complicado determinar de manera específica cuales son las sustancias químicas a las que se ha expuesto una persona. Puede tardar mucho tiempo, incluso décadas, para que aparezca un cáncer después de una exposición, y tal vez la persona no sepa de la exposición o no la recuerde.
- Aunque se observe que una sustancia química causa cáncer en una prueba de laboratorio, esto no necesariamente significa que la sustancia provocará cáncer en las personas que se exponen a esta sustancia química en el ambiente. Es posible que una sustancia química cause cáncer cuando se prueba en concentraciones altas en los estudios de laboratorio, pero no cuando se encuentra en el medio ambiente debido a que tiene concentraciones más bajas.
- Una sustancia química individual quizás produzca solo un aumento pequeño en el riesgo, y es difícil detectar ese aumento cuando también hay otros factores que tal vez afecten el riesgo de cáncer de mama en la mujer.
Estos motivos hacen que sea difícil saber qué sustancias químicas aumentan el riesgo de cáncer de mama. Se necesitan más estudios para saber si las sustancias químicas del ambiente afectan el riesgo de cáncer de mama en la mujer. Para obtener más información, consulte el siguiente enlace Carcinógenos en el medio ambiente y el riesgo de cáncer.
Los estudios han mostrado que algunos factores tienen poco o ningún efecto en el riesgo de cáncer de mama.
Lo siguiente tiene poco o ningún efecto en el riesgo de cáncer de mama:
- Someterse a un aborto.
- Cambiar la alimentación, como comer menos grasas, y más frutas y vegetales.
- Tomar vitaminas, como fenretinida (un tipo de vitamina A).
- Fumar cigarrillos, tanto de modo activo como pasivo (inhalar el humo de tabaco por exposición pasiva).
- Usar desodorantes o antitranspirantes para las axilas.
- Tomar estatinas (medicamentos que reducen el colesterol).
- Tomar bisfosfonatos (medicamentos que se utilizan para tratar la osteoporosis y la hipercalcemia) por vía oral o por infusión intravenosa.
- Cambios en el ritmo circadiano (alteraciones físicas, mentales y de comportamiento que se deben principalmente a los ciclos de oscuridad y luz de 24 horas), que a veces se ve afectado por el trabajo nocturno o el nivel de luz en el dormitorio por la noche.
Los ensayos clínicos de prevención sirven para estudiar formas de prevenir el cáncer.
Los ensayos clínicos de prevención del cáncer sirven para estudiar formas de disminuir el riesgo de ciertos tipos de cáncer. En algunos ensayos de prevención del cáncer participan personas sanas que nunca tuvieron cáncer pero presentan más riesgo de tenerlo. Otros ensayos de prevención son para personas que tuvieron cáncer y buscan evitar otro cáncer del mismo tipo o disminuir las probabilidades de tener un tipo nuevo de cáncer. También hay ensayos con voluntarios sanos de quienes no se conoce ningún factor de riesgo de cáncer.
El propósito de algunos ensayos clínicos de prevención del cáncer es determinar si las personas pueden tomar medidas para evitar la enfermedad. Estas medidas incluyen hacer más ejercicio, dejar de fumar o tomar ciertos medicamentos, vitaminas, minerales o suplementos alimentarios.
En los ensayos clínicos se estudian nuevas maneras de prevenir el cáncer de mama.
La información en inglés sobre los ensayos clínicos patrocinados por el Instituto Nacional del Cáncer (NCI) se encuentra en la página de Internet clinical trials search. Para obtener información en inglés sobre ensayos clínicos patrocinados por otras organizaciones, consulte el portal de Internet ClinicalTrials.gov.