Aspectos generales de las opciones de tratamiento
Hay diferentes tipos de tratamiento para los pacientes con leucemia linfoblástica aguda.
Se dispone de diferentes tipos de tratamientos para las personas con leucemia linfoblástica aguda (LLA). El equipo de atención del cáncer le ayudará a decidir el plan de tratamiento, que suele incluir varias opciones. Se tendrán en cuenta muchos factores, entre otros, si la LLA no se ha tratado, si está en remisión o recidiva, además de su estado general de salud y sus preferencias. El plan incluirá información sobre el tipo de cáncer, además de las opciones, objetivos, posibles efectos secundarios y la duración esperada del tratamiento.
Hablar con el equipo de atención del cáncer antes de comenzar el tratamiento para saber qué sucederá será útil. Quizás quiera informarse sobre qué necesita hacer antes de empezar el tratamiento, cómo se sentirá en el transcurso del mismo y qué tipo de ayuda necesitará. Para obtener más información, consulte Preguntas para el médico sobre el tratamiento.
Por lo general, el tratamiento de la leucemia linfoblástica aguda tiene dos fases.
El tratamiento de la LLA se realiza en las siguientes fases:
- La terapia de inducción de la remisión es la primera fase del tratamiento. La meta es eliminar las células leucémicas de la sangre y la médula ósea. Esto lleva a la remisión de la leucemia.
- La terapia de posremisión es la segunda fase del tratamiento. Comienza una vez que la leucemia está en remisión. La meta es eliminar cualquier célula leucémica restante que tal vez no esté activa, pero que podría volver a multiplicarse y causar una recaída. Esta fase también se llama terapia de continuación de la remisión.
El tratamiento llamado profilaxis del sistema nervioso central (SNC) se suele administrar en todas las fases. Debido a que en ocasiones las dosis estándar de quimioterapia no llegan a las células leucémicas en el SNC (encéfalo y médula espinal) algunas de estas células logran esconderse en el SNC. La quimioterapia sistémica administrada en dosis altas, la quimioterapia intratecal y la radioterapia dirigida al encéfalo llegan a las células leucémicas en el SNC. Estos tratamientos se administran para destruir las células leucémicas y disminuir la probabilidad de que la leucemia recidive (vuelva).
Se utilizan los siguientes tipos de tratamiento:
Quimioterapia
En la quimioterapia, se usan medicamentos para interrumpir la formación de células cancerosas, ya sea mediante su destrucción o al impedir su multiplicación. La forma en que se administra la quimioterapia depende de si las células leucémicas se diseminaron al sistema nervioso central (SNC; encéfalo y médula espinal).
En la quimioterapia sistémica los medicamentos se toman por la boca o se inyectan en una vena o músculo. Cuando se administran de esta forma, los medicamentos ingresan al torrente sanguíneo y llegan a las células cancerosas de todo el cuerpo.
La quimioterapia intratecal se usa para tratar la LLA que se podría diseminar al encéfalo y la médula espinal o que ya lo hizo. Es un método para administrar la quimioterapia directamente en el líquido cefalorraquídeo, que es el líquido que rodea el encéfalo y la médula espinal. Se llama profilaxis del SNC cuando este método se usa para disminuir la probabilidad de que las células leucémicas se diseminen al encéfalo y la médula espinal. 
Para obtener más información en inglés, consulte Drugs Approved for Acute Lymphoblastic Leukemia (Medicamentos aprobados para la leucemia linfoblástica aguda).
Para obtener más información sobre el efecto, la forma de administración, los efectos secundarios comunes y otros datos de la quimioterapia, consulte Quimioterapia para tratar el cáncer y La quimioterapia y usted: Apoyo para las personas con cáncer.
Radioterapia
En la radioterapia se usan rayos X de alta energía u otros tipos de radiación para destruir células cancerosas o impedir que se multipliquen. La radioterapia externa es un tipo de radioterapia para la que se usa una máquina que envía la radiación desde el exterior del cuerpo hacia el área en la que se encuentra el cáncer.
En el tratamiento de la LLA que podría diseminarse al encéfalo y la médula espinal o que ya lo hizo, a veces se usa radioterapia externa. Cuando se usa de esta manera, se llama terapia santuario en el sistema nervioso central (SNC) o profilaxis del SNC. La irradiación corporal total se usa para administrar radiación por todo el cuerpo como preparación para un trasplante de células madre. A veces también se usa radioterapia externa como terapia paliativa para aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida.
Para obtener más información, consulte Radioterapia de haz externo para el cáncer y Efectos secundarios de la radioterapia.
Quimioterapia con trasplante de células madre
La quimioterapia se administra para destruir células cancerosas. Durante el tratamiento del cáncer, también se destruyen las células sanas, incluso las células formadoras de sangre. El trasplante de células madre es un tratamiento para reemplazar estas células formadoras de sangre. Las células madre (células sanguíneas inmaduras) se extraen de la sangre o la médula ósea del paciente o de un donante, se congelan y almacenan. Después de que el paciente termina la quimioterapia y la radioterapia, las células madre almacenadas se descongelan y se devuelven al paciente mediante una infusión. Estas células madre que se vuelven a infundir se convierten en células sanguíneas del cuerpo y restauran las células destruidas.
Para obtener más información, consulte Trasplantes de células madre en el tratamiento del cáncer.
Terapia dirigida
En la terapia dirigida se utilizan medicamentos u otras sustancias a fin de identificar y atacar células cancerosas específicas. Es posible que el equipo médico indique pruebas de biomarcadores para predecir la respuesta que usted tendrá ante ciertos medicamentos de terapia dirigida. Para obtener más información, consulte Pruebas de biomarcadores para el tratamiento de cáncer.
Los medicamentos de terapia dirigida que se usan para tratar la LLA son las siguientes:
- Dasatinib.
- Mesilato de imatinib.
- Inotuzumab ozogamicina.
- Nilotinib.
Para obtener más información, consulte Terapia dirigida para tratar el cáncer.
Inmunoterapia
La inmunoterapia ayuda al sistema inmunitario a combatir el cáncer. Es posible que el equipo médico indique pruebas de biomarcadores para predecir la respuesta que usted tendrá ante ciertos medicamentos de inmunoterapia. Para obtener más información, consulte Pruebas de biomarcadores para el tratamiento de cáncer.
Los medicamentos de inmunoterapia que se usan para tratar LLA son las siguientes:
- Blinatumomab.
- Inotuzumab ozogamicina.
- Terapia de células T con CAR con brexucabtagén autoleucel o tisagenlecleucel.
Para obtener más información, consulte Inmunoterapia para tratar el cáncer.
Se están probando nuevos tipos de tratamiento en ensayos clínicos.
Es posible que algunos pacientes tengan la opción de participar en un ensayo clínico. Hay diferentes tipos de ensayos clínicos para personas con cáncer. Por ejemplo, en un ensayo de tratamiento se prueban opciones terapéuticas nuevas o formas novedosas de usar las terapias actuales. En los ensayos de cuidados médicos de apoyo y cuidados paliativos se analiza la manera de mejorar la calidad de vida, en especial de quienes presentan efectos secundarios del cáncer y su tratamiento.
Puede usar el buscador de ensayos clínicos en inglés para encontrar los ensayos clínicos que el NCI patrocina y que aceptan pacientes en este momento. Las opciones de búsqueda le permiten encontrar ensayos según el tipo de cáncer, la edad del paciente y el lugar donde se llevan a cabo. La información en inglés sobre ensayos clínicos patrocinados por otras organizaciones, se encuentra en el portal de Internet ClinicalTrials.gov.
Para obtener más información sobre ensayos clínicos, incluso sobre cómo encontrar y participar en uno de estos, consulte Información sobre estudios clínicos para pacientes y cuidadores.
A veces el tratamiento de la leucemia linfoblástica aguda causa efectos secundarios.
Para obtener más información sobre los efectos secundarios que causa el tratamiento para el cáncer, consulte nuestra página sobre efectos secundarios.
Los efectos secundarios del tratamiento del cáncer que empiezan después del mismo y continúan durante meses o años se llaman efectos tardíos. Los efectos tardíos del tratamiento de la LLA incluyen el riesgo de segundos cánceres (nuevos tipos de cáncer). Los exámenes de seguimiento periódicos son muy importantes para los sobrevivientes a largo plazo.
A veces se necesita atención de seguimiento.
A medida que avanza el tratamiento, se harán exámenes y revisiones periódicas. Es posible que se repitan algunas pruebas que se hicieron para diagnosticar o estadificar el cáncer, con el fin de evaluar qué tan bien está funcionando el tratamiento. Las decisiones acerca de seguir, cambiar o suspender el tratamiento se pueden basar en los resultados de estas pruebas.
Algunas de las pruebas se repiten cada tanto después de terminar el tratamiento. Los resultados de estas pruebas muestran si la afección cambió o si el cáncer recidivó (volvió).