Aspectos generales de las opciones de tratamiento
Hay diferentes tipos de tratamiento para los pacientes con tumores neuroendocrinos gastrointestinales.
Hay diferentes tipos de tratamiento para los pacientes con tumores neuroendocrinos gastrointestinales. Algunos tratamientos son estándar (tratamiento que se usa en la actualidad) y otros se están probando en ensayos clínicos. Un ensayo clínico de un tratamiento es un estudio de investigación con el fin de mejorar los tratamientos actuales u obtener información sobre tratamientos nuevos para los pacientes de cáncer. A veces, cuando en los ensayos clínicos se demuestra que un tratamiento nuevo es mejor que el tratamiento estándar, el tratamiento nuevo se convierte en el tratamiento estándar. Los pacientes podrían considerar la participación en un ensayo clínico. En algunos ensayos clínicos solo se aceptan pacientes que no comenzaron el tratamiento.
Se utilizan los siguientes tipos de tratamiento:
Cirugía
El tratamiento de los tumores neuroendocrinos gastrointestinales por lo habitual incluye cirugía. Es posible usar uno de los siguientes procedimientos quirúrgicos:
- Resección endoscópica: cirugía para extirpar un tumor pequeño que está en el revestimiento interno del tubo gastrointestinal. Se introduce un endoscopio por la boca y se pasa por el esófago hasta el estómago y, algunas veces, hasta el duodeno. Un endoscopio es un instrumento delgado en forma de tubo, con una luz y una lente para observar, y una herramienta para extraer tejido tumoral.
- Resección local: cirugía para extirpar un tumor y una pequeña cantidad del tejido normal que lo rodea.
- Extirpación: cirugía para extirpar una parte o todo el órgano que contiene cáncer. A veces también se extirpan los ganglios linfáticos cercanos.
- Criocirugía: tratamiento para el que se usa un instrumento para congelar y destruir el tumor. Este tipo de tratamiento también se llama crioterapia. El médico puede usar una ecografía para guiar el instrumento.
- Ablación por radiofrecuencia: empleo de una sonda especial con electrodos minúsculos que emiten ondas de radio de alta energía (similares a microondas) que destruyen células cancerosas. Se introduce la sonda a través de la piel o de una incisión (corte) en el abdomen.
- Trasplante de hígado: cirugía para extirpar todo el hígado y reemplazarlo con un hígado sano de un donante.
- Embolización de la arteria hepática: procedimiento para embolizar (bloquear) la arteria hepática, que es el vaso sanguíneo principal que transporta sangre hacia el hígado. El bloqueo del flujo de sangre al hígado ayuda a destruir las células cancerosas que se multiplican allí.
Radioterapia
La radioterapia es un tratamiento del cáncer para el que se usan rayos X de alta energía u otros tipos de radiación para destruir células cancerosas o impedir que se multipliquen. Hay dos tipos de radioterapia.
- La radioterapia externa es un tipo de radioterapia para la que se usa una máquina que envía la radiación desde el exterior del cuerpo hacía el área en la que se encuentra el cáncer.
- La radioterapia interna es un tipo de radioterapia para la que se usa una sustancia radiactiva sellada en agujas, semillas, alambres o catéteres que se colocan directamente en el cáncer o cerca de este.
La terapia con radiofármacos es un tipo de radioterapia interna. Se envía radiación al tumor mediante la administración de un medicamento unido a una sustancia radiactiva, como el yodo I 131. La sustancia radiactiva destruye las células tumorales.
Las radioterapias externa e interna se usan para tratar los tumores neuroendocrinos gastrointestinales que se diseminaron a otras partes del cuerpo.
Quimioterapia
La quimioterapia es un tratamiento del cáncer en el que se usan medicamentos para interrumpir la formación de células cancerosas, ya sea mediante su destrucción o al impedir su multiplicación. Cuando la quimioterapia se toma por boca o se inyecta en una vena o un músculo, los medicamentos ingresan al torrente sanguíneo y pueden llegar a las células cancerosas de todo el cuerpo (quimioterapia sistémica). Cuando la quimioterapia se coloca directamente en el líquido cefalorraquídeo, un órgano o una cavidad corporal, como el abdomen, los medicamentos afectan sobre todo las células cancerosas de esas áreas (quimioterapia regional).
La quimioembolización de la arteria hepática es un tipo de quimioterapia regional que se puede usar para tratar un tumor neuroendocrino gastrointestinal que se diseminó al hígado. El medicamento contra el cáncer se inyecta en la arteria hepática a través de un catéter (tubo delgado). El medicamento se combina con una sustancia que emboliza (bloquea) la arteria e interrumpe el flujo de sangre hacia el tumor. La mayor parte del medicamento contra el cáncer queda atrapada cerca del tumor y solo una cantidad pequeña llega a otras partes del cuerpo. El bloqueo puede ser temporal o permanente, según la sustancia que se utilice para bloquear la arteria. Esto evita que el tumor reciba el oxígeno y los nutrientes que necesita para crecer. El hígado continúa recibiendo sangre de la vena porta, que transporta la sangre desde el estómago y el intestino.
La manera en que se administra la quimioterapia depende del tipo y el estadio del cáncer que se esté tratando.
Terapia hormonal
La terapia hormonal con un análogo de la somatostatina es un tratamiento que impide que se elaboren demasiadas hormonas. Los tumores neuroendocrinos gastrointestinales se tratan con octreotida o lanreotida, que se inyectan debajo de la piel o en el músculo. También es posible que la octreotida y la lanreotida detengan un poco el crecimiento del tumor.
A veces también se necesita tratamiento para el síndrome carcinoide.
El tratamiento del síndrome carcinoide incluye las siguientes opciones:
- Terapia con hormonas que incluya un análogo de la somatostatina para impedir la elaboración de hormonas en exceso. El síndrome carcinoide se trata con octreotida o lanreotida para disminuir los sofocos y la diarrea. La octreotida y la lanreotida a veces también ayudan a retrasar el crecimiento del tumor.
- La terapia con interferón estimula el sistema inmunitario para que funcione mejor y disminuya los sofocos y la diarrea. Es posible que el interferón también ayude a retrasar el crecimiento del tumor.
- Medicamentos para la diarrea.
- Medicamentos para las erupciones de la piel.
- Medicamentos para respirar mejor.
- Medicamentos que se toman antes de la anestesia para un procedimiento médico.
Otras maneras de ayudar a tratar el síndrome carcinoide incluyen evitar las cosas que causan sofocos o dificultad para respirar, como las bebidas alcohólicas, los frutos secos, ciertos quesos y alimentos con capsaicina, como los pimientos picantes. Evitar situaciones que causen estrés y ciertos tipos de actividad física quizás también ayude a tratar el síndrome carcinoide.
En algunos pacientes con síndrome carcinoide cardiaco se reemplaza una válvula cardíaca.
Se están probando nuevos tipos de tratamiento en ensayos clínicos.
En esta sección del sumario se describen los tratamientos que se estudian en ensayos clínicos. Es posible que no se mencionen todos los tratamientos nuevos en estudio. Para obtener más información sobre ensayos clínicos, consulte el portal de Internet del NCI.
Terapia dirigida
La terapia dirigida es un tipo de tratamiento para el que se utilizan medicamentos u otras sustancias a fin de identificar y atacar células cancerosas específicas. Hay varios tipos de terapia dirigidas en estudio para el tratamiento de los tumores neuroendocrinos gastrointestinales.
A veces el tratamiento de los tumores neuroendocrinos gastrointestinales causa efectos secundarios.
Para obtener más información sobre los efectos secundarios que causa el tratamiento para el cáncer, consulte nuestra página sobre efectos secundarios.
Los pacientes podrían considerar la participación en un ensayo clínico.
Para algunos pacientes, la mejor elección de tratamiento podría ser un ensayo clínico. Los ensayos clínicos son parte del proceso de investigación del cáncer. Los ensayos clínicos se llevan a cabo para saber si los tratamientos nuevos para el cáncer son inocuos (seguros) y eficaces, o mejores que el tratamiento estándar.
Muchos de los tratamientos estándar actuales se basan en ensayos clínicos anteriores. Los pacientes que participan en un ensayo clínico reciben el tratamiento estándar o son de los primeros en recibir el tratamiento nuevo.
Los pacientes que participan en los ensayos clínicos también ayudan a mejorar la forma en que se tratará el cáncer en el futuro. Aunque los ensayos clínicos no siempre llevan a tratamientos eficaces, a menudo responden a preguntas importantes y ayudan a avanzar en la investigación.
Los pacientes ingresan en los ensayos clínicos antes, durante o después de comenzar el tratamiento para el cáncer.
En algunos ensayos clínicos solo se aceptan a pacientes que aún no recibieron tratamiento. En otros ensayos se prueban terapias en pacientes de cáncer que no mejoraron. También hay ensayos clínicos en los que se prueban formas nuevas de impedir que el cáncer recidive (vuelva) o de disminuir los efectos secundarios del tratamiento del cáncer.
Los ensayos clínicos se realizan en muchas partes del país. La información en inglés sobre los ensayos clínicos patrocinados por el Instituto Nacional del Cáncer (NCI) se encuentra en la página de Internet clinical trials search. Para obtener información en inglés sobre ensayos clínicos patrocinados por otras organizaciones, consulte el portal de Internet ClinicalTrials.gov.
A veces se necesitan pruebas de seguimiento.
A medida que avanza el tratamiento, se harán exámenes y revisiones periódicas. Es posible que se repitan algunas pruebas que se hicieron para diagnosticar o estadificar el cáncer, con el fin de evaluar qué tan bien está funcionando el tratamiento. Las decisiones acerca de seguir, cambiar o suspender el tratamiento se pueden basar en los resultados de estas pruebas.
Algunas de las pruebas se repiten cada tanto después de terminar el tratamiento. Los resultados de estas pruebas muestran si la afección cambió o si el cáncer recidivó (volvió).